Hola! Soy Krislady Maya, venezolana, diseñadora gráfica, y me complace compartir mi experiencia como madre y emprendedora en este artículo.
Ser madre de por sí ya es un rol importante, y nos lleva a pasar un día a día lleno de todo un poco, alegrías, incertidumbre, satisfacciones, molestias, preocupaciones…
Emprender no se queda atrás, porque nos hace tomar acción por nuestra pasión, en este proceso nos encontramos con muchas situaciones, y mientras hacemos ambas cosas se vuelve una experiencia a veces gratificante y otras veces estresante, sobre todo en este tiempo de cuarentena, con todo este tema del covid19.
No ha sido fácil, y estoy segura que a algunas mamás nos ha tocado algo fuerte, más aún aquellas que enfrentan la vida sin el apoyo de sus parejas.
Como madre, uno quiere ver a sus hijos crecer, pero la razón por la cual uno decide tener ambos roles puede variar mucho, en mi caso les digo algo: Siempre he querido ser independiente pero a la vez no me he querido perder el hecho de tener a mis niños y hoy día estoy en medio de un proceso de empoderamiento y autoeducación, y me siento contenta de estar progresando, pero no siempre fue así…
Estuve años frustrada, he pasado por ciertas situaciones en mi vida; cuando estaba en la universidad tuve que hacer un stop porque en ese entonces me enteré que estaba embaraza, pasó unos años y retomé los estudios, haciendo un enorme esfuerzo en todo sentido tanto económico como físico y con la ayuda de mi pareja, puesto que vivía distante de donde estudiaba, me tocaba acostarme bien tarde muchas veces y madrugar (a veces hasta amanecía), regresaba siempre súper cansada y sentía que a veces no tenía la atención adecuada hacía mi hijo, pero algo tenía en mente y es completar esa profesión que tanto me gusta para trabajar de manera independiente y dedicarle más tiempo a mi niño.
Y por fin lo logré, terminé la carrera, y pronto llegó mi nuevo embarazo, eem pues sí, y la verdad ya para este momento la situación país estaba muy pero muy mal, yo sin ejercer mi profesión como tal, mi esposo solo con todas las responsabilidades a cargo, mis depresiones por no sentirme útil, por no poder ayudar, y la verdad es que no me sentía bien solo siendo ama de casa, lo detestaba pero no sabía qué hacer, estaba tan desorientada. El tiempo pasó rápido cuando ya tenía a mi bebé en brazos, me tocó dedicarme de lleno a los niños sobre todo mí recién nacida…Así pase otros años, solo en casa al cuido de ellos.
Esto es solo parte de mi historia, y es gracias a esto que viví que hoy día me sirve para inspirar a otras madres y para hacerles reflexionar que uno si puede darle un cambio a su vida, que somos mujeres luchadoras, tan solo el hecho de ser madres es algo muy impresionante porque tenemos el compromiso de formar bien a nuestros hijos, para hacerlos buenas personas, y cuando a la vez decidimos emprender se puede poner un poco cuesta arriba, no todo es color de rosas…
Pero cuando uno tiene la visión de esos anhelos, de tus sueños, cuando uno consigue esa motivación intrínseca, se despierta una emoción, una llama que te hace buscar una solución, una manera para salir adelante, y en esta búsqueda me he encontrado con que puedo hacer un modelo de negocio con mis conocimientos, que puedo arriesgarme y llevar mi mensaje al mundo porque mi intención “REAL” es ayudar a los demás.
Ayudar siempre se me ha dado de manera natural, en este proceso descubrí mis fortalezas, me he conocido más profundamente, llegué al pasado para darme cuenta que viví lo que viví con un propósito, y estoy feliz de proyectar mis talentos, ya que ahora sé que mi misión es ayudar a emprendedores a potenciar sus negocios, aumentar las posibilidades de sus ventas y con ello cada quien tendrá las oportunidades latentes para lograr una mejor calidad de vida, si cada quien tiene una mejor calidad de vida, eso también conlleva a la felicidad…
Es decir, es tan maravilloso contribuir a la felicidad de todos!!! Es lo que me gusta, soy mamá emprendedora, yo puedo y tú también.